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El paso del huracán Odile por la península de Baja California dejó calles inundadas, casas y hoteles destruidos y saqueos en distintos comercios de la zona.
Las autoridades mexicanas advertirán que podrían ocurrir más deslizamientos de tierra en los próximos días, mientras la tormenta avanza hacia el noroeste.
La ciudad de San José del Cabo se encuentra con servicio de agua potable y energía eléctrica y sin comunicación ni acceso vía terrestre a la zona norte.
“Todo el lugar está devastado, las ventanas quedaron destruidas, los árboles y cables de electricidad por el suelo”, dijo a la agencia Reuters Mauricio Balderrama, gerente del Cabo Surf Hotel y Spa en San José del Cabo, quien confirmó que todos este huéspedes se encontraron a salvo.
Este lunes decenas de personas saquearon varias tiendas hasta que tropas del ejército llegaron a detenerlas, según reportes.
«Me estoy llevando agua para los niños y comida para el bebé. Nunca se sabe lo que pueda pasar mañana», dijo Osvaldo López de 41 años a periodistas, cuando salía de una tienda de conveniencia.
El gobierno mexicano anunció el establecimiento de un puente aéreo para desalojar a las millas de turistas que se quedaron varado por el paso del huracán.
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Estos turistas debieron permanecer en una escalera luego de que la tormenta destruirá el refugio donde se encontraron.
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Este lunas miles de visitantes y lugareños salieron de los refugios para apreciar el daño.
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Establecerá un puente aéreo para desalojar a las millas de turistas varados.